PERFILES.-Belén Artuñedo

En el umbral de cada desaparición,

estamos juntas,

apilando herencias, cimientos insolubles,

guardandonos las caras de nuestra moneda

que venimos apostándole al amor.

De tus piedras se levanta mi torre

y tus muros detienen el sol que me hace sombra.

Hemos pagado a medias cada huída,

dispongo para tus huéspedes mis habitaciones

y, vestida de reina, cuidas de mi mendiga.

Si te arrojas desnuda, echo las redes

y acarreo tu fiebre por mis dunas.

Y sé que contaré contigo para emsamblar los trozos

cuando llenes de restos las maletas del viaje

que a ti me devuelva.

A C. por ese fin de semana de celebración de cambio de orden. Por todo lo que me distes y me das.

Imagen de aquí.

BELEN ARTUÑEDO.- Dentro

Las estancias de mi cuerpo

guardan nombres en sus rincones,

atienden el humo del invierno

y caldean el recinto al que desciendo

despacio.

Me visito cada día.

Para reposar a un hombre y cubrirlo

y darle mi pecho.

Allí cabe su carne donde hacer noche,

lo alojo en el centro,

en el tronco hendido, la roca horadada,

la bolsa de aire, lo más vacío que poseeo:

el secreto descanso.

La tierra que recoge este abrazo perdido

lo florecerá.

Del libro Teselas.

Imagen "Amantes 108". Nicoletta

EL PUNTO DE VISTA DE UNA MUJER*.-Las mujeres son fuertes, las mujeres son importantes. Los hombres zhun/twa** dicen que las mujeres son los jefes, las ricas y las prudentes. Ello es debido a que las mujeres poseen algo muy importante, algo que permite a los hombres vivir: sus genitales. Una mujer pueda hacer que un hombre viva incluso si está casi muerto. Ella le puede dar sexo y hacer que viva de nuevo. Si ella se negara a hacerlo, él moriría. Si no hubiera mujeres disponibles, el semen mataría a los propios hombres. ¿Lo sabías? Si sólo hubiera hombres, todos morirían. Las mujeres hacen que ellos vivan.

*Fuente: Palabras de Nisa, mujer ¡kung san, según grabación de Marjorie Shostak.
**zhun/twa es uno de los nombre por los que se conoce a los ¡kung san.

Antropología Cultural. Marvin Harrris

Quiero ser una !kung san (IV).-Algo hemos comentado anteriormente. Los ¡kung san dedican solamente unas 20 horas por semana de caza. Si trabajaran mas horas por semana no solamente les resultaría cada vez mas difícil capturar sus presas, sino que además correrían el riesgo de agotar la población animal por debajo del punto de recuperación. En cierta forma, los ¡kung se benefician de estar a merced de los índices naturales del incremento de plantas y animales en su hábitat; su modo de producción les obliga a trabajar menos que los agricultores intensivos o los obreros de las fábricas modernas.


Antropología Cultural. Marvin Harris